miércoles, 25 de junio de 2008

Sin Piel

Se escama mi piel
Y aun así
No deseo perderla.
Quedar expuesto al sol
Me aterra.
¿Quién quiere perder parte de su cuerpo?
Si sabidas son las tristes historias
De mancos
Rengos
Y babosas,
Que despojados de si
Pierden el norte.
Pues no, seguiré escamando
Hasta que mis brazos se desprendan
Y desmembrado,
Mis cuerpos corran solos.

lunes, 23 de junio de 2008

Un Cuerpo Extraño

No es solo el reflejo lo que nos une
Pues no soy solamente imagen espejada
Brillante y vivida reproducción de tus gesticulaciones.
Por más etéreos que parezcan
Por más frágiles que sean los trozos de cristal.
No pareces entender…
Que ellos son míos.
Es inútil que trates de verlo desde tus ojos,
Es algo que la vista solo comprendería
Tiñéndolo de azul
Y aun así, sería difícil de entender.
Ya ves, el espejo es solo arena
Y la arena no es más que una montaña
Una pila de pequeños granos,
Extendida a lo largo de la playa.
Y cada grano no es más que una palabra
De la que me valgo para decir tu nombre.
¡Cualquiera de ellos!
Si hasta me empeño en cambiar mi silueta,
Con tal de creer que será distinto.
Sin embargo, será.
Como siempre fue.
Sabrás pues, que el motivo de mi encono
De mi reiterada decepción,
Se debe a que, constantemente,
Me veo morir en otros brazos.
Y a ti, dichoso.
Escapando, ajeno a lo que nos has dejado.
Atrás.

sábado, 14 de junio de 2008

Pasaje Otoñal

Un árbol castrado
Llorando junto a su reciente impotencia.
Se lamenta el no poder volver a hablar con el viento,
O reír del todo.
Me mira triste y desnudo
Y ve en mí un posible verdugo.
Que inocente arbolito,
Aun cree que podrá escapar
De su propia corteza.

miércoles, 11 de junio de 2008

Héctor

Que entre los sauces

Y en copas negras

Se sirva el vino y se coma bien.


Porque recuerdo en una cara,

Piedra tallada,

Una sonrisa sobre la piel.


Quizás el vino hoy guarde luto

Quizás mañana pueda beber.

miércoles, 4 de junio de 2008

Pegamento (poxipol)

Perdida entre rosas que secan antes del otoño.

Rastros de perfumes de una piel lejana,

Piel que te aleja del cuerpo donde habrás de dormir.

Recostada en pasados inviernos pesados

De finales inconclusos,

De insípidos adioses,

De cajas vacías prendidas fuego,

De fuegos extintos sin cenizas.

Al dejar el balde al costada de tu cama,

Te acuestas a dormir

Para pensar en tus héroes del pasado

Que te conquistan hoy.